El 24 de mayo, el presidente Donald Trump anunció una segunda ronda de asistencia financiera a los agricultores afectados por las recientes guerras comerciales por un valor de $ 16 mil millones en pagos directos, compras de excedentes de productos básicos y el desarrollo de nuevos mercados de exportación.

Esto aunado al paquete de asistencia de $ 11 mil millones que autorizó el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos el año pasado.

Cabe la posibilidad de que más productores de cerezas dulces soliciten apoyos bajo el Programa de Facilitación del Mercado en 2019, gracias a los cambios en la elegibilidad respaldados por la Senadora de Washington María Cantwell y el Representante Dan Newhouse. Su disposición, que expande la elegibilidad a una variedad más amplia de estructuras comerciales, se aprobó en el Senado el jueves pasado como parte de un proyecto de ley de presupuesto de ayuda en caso de desastre, aunque sigue en espera de aprobarse en la Cámara de Representantes.

“El Northwest Horticultural Council celebra que este proyecto de ley proporcionará a todos los productores de cerezas dulces, que siguen siendo afectados por los aranceles de represalia impuestos por China, con por la oportunidad de solicitar la mitigación comercial ofrecida por el USDA”, dijo Mark Powers, Presidente del Consejo, en un comunicado.

Los productores de manzanas, peras y otras frutas, verduras, carne y productos lácteos afectados por los aranceles de represalia, pueden obtener asistencia a través del Programa de Compra y Distribución de Alimentos del USDA, aunque el USDA aún no entra en detalles sobre qué cultivos serían elegibles para compras excedentes. El sector frutícola también debe ser elegible para financiamiento para desarrollar nuevos mercados de exportación.

Aunque los grupos de productores aprecian la ayuda orientada a mitigar el impacto de los aranceles de represalia, algunos también aprovecharon la oportunidad para criticar las guerras comerciales en curso y los impactos a largo plazo de la pérdida de acceso al mercado de China.

“Apreciamos los esfuerzos de la Administración para compensar nuevamente, aunque de forma parcial, los daños provocados al sector agrícola como resultado de la guerra comercial que se desarrolla con China”, dijo Tom Nassif, Director Ejecutivo de Western Growers, en una declaración. “En cualquier caso, es importante reconocer que el paquete actual de ayuda comercial, como fue el caso con el último, se queda corto para subsanar al sector. De hecho, a los agricultores estadounidenses les tomará muchos años, si acaso , recuperarse de los ingresos comerciales perdidos y, lo que es más importante, los mercados perdidos producto de la continuación de las interrupciones comerciales con China ”.